Descripción
Carlos V hizo su entrada solemne en el monasterio-palacio de Yuste el 3 de febrero de 1557. Allí permaneció hasta el día de su muerte, el 21 de septiembre de 1558, rodeado de una pequeña corte, confortado por la comunidad jerónima y acompañado de un escaso número de libros, obras de arte y objetos personales que había llevado consigo.