Descripción
Cuando las aguerridas tropas romanas desembarcaron en Britania tenían pocos motivos para esperar otra cosa que una rápida y sencilla invásión de unas tierras agrestes de condiciones meteorológicas infernales y apenas habitadas por un puñado de tribus semisalvajes. Sin embargo esos bárbaros resultan ser luchadores duros de roer y la posibilidad de convertir a una de estas tribus en aliada no debe desperdiciarse.