Descripción
Era un día espantoso. No hubiera debido serlo precisamente ahora que, al final, todas las piezas habían conseguido encajar perfectamente: su magnífico empleo duramente ganado y con mejores perspectivas que nunca desde su promoción al puesto de redactora, el hombre al que adoraba caminando a su lado y confesándole quie la necesitaba, el sol de principios de primavera recordándole la prometedora aventura que tenía por delante.