Descripción
Sin duda resplandeció la figura de Pío XII como la de un eximio maestro en la última época. En sus discursos y alocuciones tocó toda clase de temas; penetraba en ellos con profundidad y novedad, no temía meterse con los puntos más nuevos y dificultosos, iluminaba caminos que estaban abriéndose, orientó muchos criterios.