Descripción
Entra en el café hacia las nueve de la noche, hora indecisa, como algunos otros días, quedándose cerca de la puerta, entre la barra y las mesas, en auqel espacio tan pisado, tierra de todos y de nadie, reino incoloro del cerillas y del limpia, con huellas de los que van directamente a la escalera que baja al comedor, huellas decididas de los triunfadores de la vida por encima de las colillas, las salivas, las servilletas…