Descripción
Escribir un cuento se parece a tirarse en paracaídas. En los relatos de este libro asistimos a la consumación de la técnica del minuto, a la explotación máxima de los matices y contradicciones de un fragmento temporal muy limitado. Trastornadas por una una cámara lenta, sutiles bombas de tiempo, las historias de El último minuto escenifican una crisis y la retienen, a veces con humor y otras veces con dolor, explorando el instante anterior al abismo. Como sugiere el epílogo, ensayo final que profundiza en el estudio del cuento: Si alguna vez Napoleón dijo vísteme despacio, que tengo prisa, quizá muchos cuentistas escribimos pensando narremos lentamente, que tenemos poco tiempo.