Descripción
El obispo de Porthminster estaba en la agonía; se mandó llamar a cuatro sobrinos, dos sobrinas y al marido de una de ellas. Se temía que no llegara al amanecer. El hombre que a mediados del pasado siglo había sido Cuffs Cherrell para sus condiscípulos de Harrow y Cambridge, el reverendo Cuthbert Cherrel en las dos parroquias que regentara en Londres, el canónigo Cherrel en los tiempos de su celebridad como predicador, y Cuthbert Porthminster durante los últimos dieciocho años, no se había casado.