Descripción
No sabemos si estamos destinados a ser río caudaloso o si hemos de parecernos a la gota de rocío que envía Dios en el desierto a la planta desconocida. Pero más brillante o más humilde nuestra obligación es cierta: no estamos destinados a salvarnos solos no sabemos si estamos destinados a ser río caudaloso o si hemos de parecernos a la gota de rocío que envía Dios en el desierto a la planta desconocida.