Descripción
Livia (58 a.C.-29 d.C.), esposa de Augusto , el primer emperador romano, y madre del segundo, Tiberio , ejerció su poder en el centro de la escena política romana durante la mayor parte de su larga vida. Se la ha presentado como una maquinadora astuta y siniestra que eliminó a sus adversarios, tantos los de su propia familia como lo de fuera. En esta biografía aparece como una persona mucho más compleja, como una mujer que se ganó hábilmente el apoyo e incluso el cariño de sus contemporáneos y que tras su muerte se convirtió en una figura muy venerada. La extraordinaria vida de Livia abarcó dos reinos que establecieron el modelo de gobierno del Imperio Romano durante los cuatro siglos siguientes.