Descripción
Un matrimonio que nunca funcionó, un único hijo tan hermético como su padre, una hermana que se alía con su mejor amiga… todos parecen dejarla fuera de sus vidas, excepto Leo, su amante. La mente y el cuerpo de Fidela se debaten en perpetua ebullición, como las espigas del cuadro que adquirió con su primer sueldo y que reflejan los vaivenes emocionales de sus últimos veinte años y, a la vez, se abren como un futuro limpio, dorado, inmenso.