Descripción
La experiencia me ha demostrado que los dibujantes, según su forma de encajar esta asignatura llamada perspectiva, pueden dividirse en dos grupos. Aquellos que la consideran un narcótico que adormece la capacidad creadora del artista y aquellos que la adoran como panacea capaz de solucionar por si sola cuantas dudas e indecisiones les obsequie su falta de nervio creador.