Descripción
Para muchos republicanos un rey no debe casarse por amor. Para gran arte de los monárquicos una plebeya como Letizia Ortiz puede ser una reina digna. El omnipresente debate que ha invadido España a raíz del compromiso sorpresa del Príncipe heredero es una demostración más de que la institución monárquica padece contradicciones esenciales.